LOCAL. Luego de algunas maniobras al interior de las potabilizadoras y el trabajo coordinado con la Comisión Nacional del Agua y el Distrito de Riego 101, el Gobierno de Mazatlán, a través de Jumapam, evitó que la producción de agua potable fuera afectada por la turbidez que presentó el Río Presidio, tras la primera lluvia fuerte en el Municipio.
Personal de la Gerencia de Operaciones inició labores de monitoreo del agua que llega a las potabilizadoras Miravalles y Los Horcones, ya que es normal que durante los primeros eventos pluviales los flujos hídricos se vean impactados con tierra y palizada, tal como ocurrió.
El Gerente General Jorge González Naranjo, y el de Operaciones, Carlos Brito López, visitaron las plantas potabilizadoras y recorrieron parte del canal de riego y los diques 6 y 5, así como la Derivadora de Siqueros.
A la par, Conagua hizo un desfogue controlado en la Derivadora de Siqueros, para evitar el ingreso de palizada y azolve al canal de riego de donde se abastecen Miravalles y Los Horcones, para generar un recambio hídrico en el canal de riego, que permite trabajar con parámetros de turbidez dentro de la norma.