Hoy terminó el plazo de ley, y la joven alcaldesa cumplió. Hizo público un documento donde se compromete a cumplir 4 ejes: Seguridad, Modernidad, orden, y difusión del arte. Todos los ejes se acompañan de conceptos como eficiencia, transformación y humanismo, figuras que sostienen la narrativa de la Cuarta Transformación. Es también un traje a la medida para que todos los funcionarios lo cumplan y no se salgan de él. Con esta medida el gobierno enfoca sus objetivos en el contexto de lo que tiene planeado hacer el gobierno estatal y federal. Se alinea pues. No es casual que el primer eje sea el que tiene que ver con la seguridad y transformación. Si la presidenta hace cumplir este objetivo, estaría llevado a Mazatlán al éxito y al buen desarrollo. Pues una ciudad como esta, con un crecimiento en el ramo inmobiliario; en las áreas industriales, Parque Aeroespacial, Mazatlán Logistics Center, por señalar solo dos. Proteger la industria hotelera, o las unidades productoras como Pinsa, son objetivos claves y necesarios. Pues sin seguridad nada funciona, no hay desarrollo. No es menos importante buscar un municipio moderno, que haya orden y que se alimente al alma con el arte. También son ejes claves. Pero insistimos, si tan sólo se avanzará al máximo, en el primero, este municipio y su gente lo agradecerían. Porque la inseguridad ya la conocemos todos, hoy día padecemos ese flagelo. Hoy la capital de Sinaloa y la zona serrana sufren el impacto de los grupos generadores de violencia. Y con ello la economía se contrae. Las consecuencias son evidentes. Pero si ocurren hechos delictivos en Culiacán, por ejemplo, decía el ex alcalde Alejandro Higuera “se siguen vendiendo las berenjenas, los tomates y las hortalizas. Pero un hecho similar en Mazatlán, afecta la percepción de paz, y los turistas, seguramente dejan de venir”. Y si hay mucha razón en eso. A Mazatlán le pega más la violencia que a otro municipio. Porque aquí se vive mayormente de la presencia de los ...